Un estudio reciente realizado en un hospital veterinario docente del norte de Italia ha demostrado la eficacia de una técnica avanzada de PCR en tiempo real para la detección del ADN proviral del virus de la leucemia felina (FeLV) en gatos. Entre 2018 y 2021, se analizaron muestras de sangre de gatos que dieron positivo en pruebas de antígenos utilizando la técnica de PCR SYBR Green Real-Time (qPCR). Los resultados revelaron que el 84.6% de los gatos incluidos en el estudio (22 de 26) resultaron positivos mediante la qPCR, lo que subraya el alto rendimiento de esta metodología.
Además, la investigación permitió caracterizar genéticamente los virus identificados. Mediante el análisis de una porción del gen de la envoltura viral (env), se encontró que 15 de los 22 gatos positivos en qPCR estaban infectados por el subtipo A del FeLV, y cinco de estos presentaban coinfección con el subtipo B.
Estos hallazgos no solo refuerzan la utilidad de las pruebas de qPCR en casos clínicos dudosos, sino que también abren la puerta a su validación en gatos negativos al antígeno p27, particularmente útil en gatos donantes de sangre para evaluar infecciones regresivas. La investigación molecular proporcionó nueva información sobre los subtipos de FeLV que circulan en el norte de Italia y sugiere la necesidad de desarrollar herramientas moleculares específicas para identificar correctamente el subtipo B del virus. Este avance es crucial para continuar con investigaciones adicionales que correlacionen este subtipo con neoplasias, mejorando así las estrategias de prevención y control de esta enfermedad devastadora en gatos domésticos.
En este estudio, se examinaron 26 gatos que dieron positivo al antígeno de FeLV mediante ensayos moleculares para confirmar el estado de la infección y se realizó la caracterización molecular de los FeLV identificados, determinando los subtipos virales que circulan en el norte de Italia. La señalización y la historia de los gatos incluidos en el estudio reflejan parcialmente las categorías de riesgo reportadas en la literatura: de hecho, solo el 57,7% de los gatos eran machos.
«Nuestros datos mostraron una mayor prevalencia de FeLV en gatos adultos, como ya se había reportado anteriormente, confirmando que la infección debe esperarse en gatos adultos como consecuencia de la reactivación de una infección previa y no solo en gatitos. La mayoría de los gatos incluidos en el estudio tenían signos clínicos o anomalías clinicopatológicas potencialmente asociadas con la infección por FeLV, probablemente dependiendo de la población de gatos investigada: gatos enfermos que visitaban el VUH. En nuestro estudio, cuatro gatos también resultaron positivos a los anticuerpos de FIV mediante la prueba PoC: tres fueron agrupados con gatos AC mientras que uno tenía manifestaciones clínicas referibles a la infección retroviral», explican los autores de la investigación.