Los humanos usamos el lenguaje verbal, acompañado de gestos y expresiones faciales, mientras que los animales se basan en la comunicación visual, auditiva y olfativa.
La respuesta es que sí, los animales se comunican como nosotros, pero ellos utilizan otro lenguaje. Las personas usamos el lenguaje verbal, aunque no exclusivamente porque también utilizamos los gestos y la expresión facial, y los animales utilizan fundamentalmente la comunicación visual, que incluye posturas corporales y expresiones faciales, la comunicación auditiva, que incluye vocalizaciones como los ladridos y la comunicación olfativa.
Dependiendo de la especie, tiene más importancia una forma de comunicación que otra. Te pongo dos ejemplos: en el caso de los perros es más importante la comunicación visual, postural y expresión facial, acompañada de vocalizaciones. Por ejemplo, los perros utilizan un lenguaje ritualizado compuesto por la postura ofensiva (cuerpo erguido, extremidades extendidas, cola hacia arriba, orejas hacia arriba) y la postura defensiva (opuesta a la anterior). Todo ello puede acompañarse de vocalizaciones y expresiones faciales. La comunicación olfativa también es importante. Cuando un perro marca con orina, deja un mensaje para los otros perros. Sin embargo, esta comunicación olfativa es más importante si cabe en los gatos. Piensa que el gato es un animal solitario, por lo que no ha tenido que desarrollar un lenguaje para comunicarse de tú a tú como el perro, que es un animal social que vive en grupo. El gato ha desarrollado un lenguaje olfativo que evita los encontronazos directos. Para esto lo que hacen es dejar señales con las uñas, dejan señales frotándose con distintas partes del cuerpo o dejan señales con orina. Y todas esas señales son mensajes para los otros gatos: “soy una hembra y estoy en celo” o “cuidadito que este es mi territorio, no te acerques”, etc.
Es obvio que la comunicación entre los animales no tiene la riqueza de la que tenemos entre las personas, pero se trasmiten entre ellos muchos más mensajes de los que suponemos. Y desde luego, aunque los mensajes sean más primitivos, se entienden entre ellos perfectamente. Es decir, tienen todas las herramientas de comunicación que necesitan. El único problema de entendimiento se puede producir durante el periodo de desarrollo que se llama de socialización, y que en el caso de los perros es desde las tres semanas de vida hasta los tres meses, y si no han tenido contacto con otros perros. Durante este periodo tienen que estar con otros individuos de su especie, tienen que convivir con ellos. Si esto no sucede, puede ocurrir que el perro no aprenda el lenguaje perruno y después, cuando sea adulto, no entienda las posturas que adoptan otros perros y esto puede llevar a malos entendidos y a peleas. En el resto de los animales, incluidas las especies que no son de compañía, la comunicación es muy parecida a este proceso que hemos explicado. Dependiendo de cada especie, usan más un tipo de lenguaje que otro, pero todas se comunican. En general, en todas las especies sociales es más importante el lenguaje visual: posturas, expresiones faciales y vocalizaciones. Y para las especies que son menos sociales suele ser más importante la comunicación olfativa. Y ocurre en todas, puede ser un caballo, una oveja o un ratón.