La frecuencia y el color del vómito, son factores que indican si su gato tiene buena salud

Aunque este comportamiento es muy común, algunos médicos veterinarios recomiendan llevar un registro de las veces que vomita el felino en la semana.

Los tenedores de estos animales de compañía saben que, a diferencia de los humanos, estas mascotas vomitan incluso cuando tienen un estado de salud óptimo. Esto sucede, en parte, por su acicalamiento, durante el cual ingieren porciones de su pelaje y que, con el pasar del tiempo, hacen que regurgiten por la cantidad que se enreda en su aparato digestivo.

Aunque este comportamiento es muy común, algunos médicos veterinarios recomiendan llevar un registro de las veces que vomita el felino durante la semana, puesto que una reincidencia en estos episodios podría indicar que el gato no tiene buena salud.

Los gatos vomitan, generalmente, una o dos veces cada semana, es lo normal, pero cuando el animal comienza a aumentar la frecuencia semanal se debe revisar su estado de salud. Otro indicador de importancia es el color del vómito; si presenta sangre o si ya comienza a regurgitar todo lo que come es otro signo de alarma.

Algunos gatos que comen muy rápido suelen ser propensos a vomitar su alimento, pero esto suele suceder casi que de inmediato después de ingerir su comida. También debe tenerse en cuenta el peso del animal, su apetito y si tiene otros síntomas como diarrea.

Generalmente es normal cuando se acicalan mucho y empiezan a botar las bolas de pelos, pero cuando no los expulsa es señal de alarma porque empiezan a acumularse en el estómago y podría generar una obstrucción intestinal. Cuando existe obstrucción intestinal, que impide defecar de manera normal al gato, se debe proceder de manera quirúrgica, puesto que se convierte en un cuerpo extraño que puede dañar el sistema intestinal del animal.

Algunos de estos animales tienen problemas para vomitar los pelos que acumulan es un organismo, por lo que se recomienda dar hierba de gato para estimular el aparato digestivo para que no se queden atascadas en su cuerpo, estas pueden fabricarse a través de cereales como la cebada.